EL FUEGO COMBATE LAS PEORES PLAGAS...
En la agricultura, no existe mejor plagicida.

   

   
Imágenes extraidas de Gooigle.

Una plaga mortal.

   Se hace difícil darle un apelativo a la plaga asesina comandada por estos tres virus: Trump, Netanyahu y Mohamed Bin Salmán.

   ¿Antihumana; Satánica; Exterminadora? Cualquiera de los tres (o  todas juntos), no estarían descolocados, los tres apelativos parecen asustadoramente válidos.

   En la Historia Universal de nuestro planeta (y también en la actualidad), se ha demostrado fehacientemente que tanto en la agricultura, como en las sociedades, solamente el fuego destruye a las plagas que diezman cosechas y pueblos enteros, para luego, desde las cenizas rebrotar nuevas cosechas y nuevas sociedades, totalmente descontaminadas de toda plaga exterminadora.

    Así, parece ser por orden natural (de la Naturaleza).

    

El Fuego Purificador.

   Lo que sí queda claro, es que la diplomacia está obsoleta. Era efectiva, cuando los líderes políticos de Occidente, aún tenían valores morales y virtudes como la empatía, la dignidad, la ética y el compromiso con la palabra expresada.

   Hoy en día, esas virtudes están en extinción entre los líderes de la mayoría de las naciones occidentales. Se está recurriendo al engaño; la mentira; el sensacionalismo; las fake news; las acusaciones sin pruebas materiales comprobatorias; al miedo colectivo y a las falsas esperanzas.

   ¿Qué resta por hacer, entonces?  ¿Cómo se puede enfrentar a esa estrategia, sin caer en sus propios métodos?

   Los sucios y hediondos métodos que logran poner la traición, como factor fundamental para instalarse ilegalmente en el Poder: Macri en la Argentina; Moreno en Ecuador; Temer/Bolsonaro en Brasil; Almagro en Uruguay. Todos traicionaron a sus partidos, a sus líderes políticos, a sus compañeros ideológicos y a sus propios pueblos.

    La respuesta a la pregunta inicial, no parece ser otra que "Borrar y empezar de nuevo".

  Empezar de nuevo.

  Naciones "no-occidentales", como China, Rusia, Irán, India, Siria, Líbano, y más recientemente Irak, se han fortalecido tanto en socio-economía, como en poder bélico.

   

    

   La naciones "occidentales" fundamentalmente de origen europeo, han comenzado a agredirse entre sí, lo que los debilita, tanto en socio-economía, como en armamentos estratégicos.

  La hegemonía occidental, que ha prevalecido en los últimos siglos, está perdiendo su posición en el escalón más alto del  planeta. Próximamente, la situación geo-política mundial creará las condiciones que ningún estratega militar querrá desperdiciar: La de provocar situaciones que lleven a encender el fuego purificador; el fuego no-nuclear que le dará el tiro de gracia al actual Orden Mundial. Nadie, en su sano juicio, se aventurará a predecir si el Nuevo Orden Mundial será la solución para los miles de millones de terrestres, que esperan ansiosos un cambio a su favor. Pero nadie, medianamente coherente, pude negar que los antecedentes de las nuevas potencias que ocuparán ese alto escalón mundial, son esperanzadores en materia de más justicia social y más humanismo: Esas potencias no-occidentales, no han invadido por la fuerza a otras naciones en las tres últimas décadas; su potencial armamentístico es de orden defensivo, y tanto sus discursos, como sus negocios y procederes unilaterales con otras naciones, han sido siempre equitativas, y no abusivas.

   La guerra, es la peor tragedia planificada de la humanidad, no entanto, la civilización global nunca ha prescindido de ella para zanjar diversos conflictos sociales; satisfacer ambiciones y aumentar el poder de infinitos individuos, gobiernos y etnias de los actores de turno. 

   La forma burda de atizar un conflicto de grandes proporciones, por parte del Orden actual, es poner al frente de naciones estratégicas a líderes con perfiles casi esquizofrénicos, como es el caso de Donald Trump en EEUU, Iván Duque en Colombia, Jair Bolsonaro en Brasil, o Mohamed bin Salmán en Arabia Saudita.

   

  Me gustaría ser optimista, pero se hace cada vez más evidente la inminencia de una 3ª guerra mundial (fuego purificador). La única esperanza que permanece fuerte, es que la próxima guerra mundial no llegue a ser nuclear.

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   Walter E.Carena

  Twitter: @WCarena