ESPAÑA-URUGUAY: Las oligarquías de estos países, compran una marioneta para intentar debilitar a la máxima fuerza política Rioplatense...
             
                                                                        Héctor Amodio Pérez (la marioneta)

...el MLN/ Tupamaros.

   Este tristemente célebre personaje de la historia contemporánea del Uruguay, extrañamente aparece después de más de 40 años de exilio en España. En este país, la oligarquía empresarial y política de entonces, lo recibió de brazos abiertos; lo protegió; lo mantuvo con falsa identidad, y ahora lo utiliza para debilitar a una fuerza política revolucionaria, que cada vez conquista más poder, admiración, y adeptos a su doctrina socialista auténtica.

  En su juventud, supo integrar las filas tupamaras y ganarse su confianza, a tal punto, que cuando decidió cambiar su lealtad, ideales y principios por una nueva identidad, confort y protección en la península ibérica, ya había ascendido a dirigente.http://unisudamericana.blogspot.com/2013/05/tupamaros-hector-amodio-perez-un-ex.html 

  Los partidos tradicionales uruguayos (Blanco y Colorado - Derecha en sus dos matizes < rural y metropolitana > ), han sufrido derrotas tras derrotas, desde que el MLN integra las filas del FA (Frente Amplio) en 1989. No se puede olvidar, que cuando los tupamaros lograron un lugar en la coalición de izquierdas, partidos como el PDC y otros, se negaron a esa iniciativa, y abandonaron la coalición cuando ésta aceptó el ingreso del MLN-T. Contribuyó al triunfo del FA por primera vez en la Capital del país, con una importante cantidad de votos (Intendencia Municipal de Montevideo - 1994, en sus primeros cinco años dentro de la fuerza política de izquierda)

  A tal punto es esto cierto, que el Partido Blanco nunca pudo aumentar su caudal electoral; en tanto que el Colorado, se redujo a la mitad - no es secreto para nadie, que los votos que perdió, emigraron hacia el FA. Es precisamente éste el temor de las oligarquías uruguayo-españolas

  ¿Porqué España?

  En los comienzos de la República Oriental del Uruguay, los ingleses fueron quienes hicieron las primeras y más importantes inversiones en el incipiente país, trayendo tecnología e infraestructura social (Transporte público: Tranvías; Transporte de larga distancia de cargas y pasajeros: Ferrocarril; alumbrado público, comercial, industrial y doméstico: Luz eléctrica; combustibles: Gas y petróleo; etc;etc ) para la modernización de la sociedad uruguaya. También impulsaron con gran énfasis el comercio y la industria.

  Sabido es, que los españoles sufren una arcaica y absurda fobia histórica hacia los ingleses.

   Uno de los más importantes políticos de finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, fué el Dr. José Batlle y Ordóñez (Partido Colorado) https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Batlle_y_Ord%C3%B3%C3%B1ez quién mantuvo estrechos vínculos político-económicos con empresarios españoles, que a su vez pretendían alejar a los ingleses del Río de la Plata, visando usufructuar las inversiones de éstos, y así recuperar el terreno perdido en esa región.

   Otro político de gran relevancia en Uruguay, fué el Dr. Luis Alberto de Herrera (Partido Blanco). Si bien eran rivales en la arena política, no lo eran en su formación ideológica, de marcado y hondo corte burgués aristocrático.

   Ahora bien, la oligarquía española tuvo una influencia económica y política fundamental, - tan es así, que el Diario más poderoso de Uruguay es El País, subsidiado herméticamente por capitales españoles http://unisudamericana.blogspot.com/2015/03/espana-y-sus-colonias-latinoamericanas.html

  En síntesis, la oligarquía española tiene un interés obsecivo en debilitar a los Partidos políticos socialistas de izquierda. No solo en Uruguay, sino en toda Latinoamerica. Y una repugnante estrategia, es anarquizar el estilo de vida progresista de los uruguayos, utilizando a un desertor del MLN-T, y difundirlo por los medios de comunicación de masas que les pertenecen: El Ovservador y El País, para - al decir de Pepe Mujica - ensuciar la cancha, en un tozudo intento por desprestigiar a quienes han contribuído al crecimiento socio-económico del Uruguay, y haber cosechado elogios a lo largo y ancho del planeta. Los uruguayos, deberían sentirse orgullosos de contar con una organización política de tan alto nivel, como lo es el MLN-Tupamaros.

  Héctor Amodio Pérez, no es más que un instrumento utilizado para desprestigiar a la fuerza política más importante - no en militantes, sino en influencia ideológica - de la región.

   No le hace nada bien al pueblo uruguayo, el distraerse de cosas más importantes, por causa de este personaje que avergüenza a los orientales de buena cepa.

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  Walter E. Carena
  Twitter: @wcarena