viernes, 17 de enero de 2025

 


DONALD TRUMP EN LA CUERDA FLOJA

El Deep State (lobby israelita-AIPAC) en alerta


 


Es muy probable que ningún político medianamente informado, desearía estar en los zapatos del futuro presidente de los EEUU. 

En su primer mandato (2017-2021), Trump se portó intrépidamente desobediente con los lineamientos de la geopolítica estadounidense. Aunque no lo fue en todos los casos, dio señales muy claras de que su pretensión era dejar de ser una marioneta movida por los titiriteros del puñado de multimillonarios que componen la mayor parte del Estado Profundo de los Estados Unidos.
En respuesta a su osadía, los titiriteros se las ingeniaron, sin mucho esfuerzo, para que no fuera reelecto en las elecciones de 2020. No contentos con su primera penitencia, se esforzaron para encontrar todo tipo de irregularidades que lo llevaran al banquillo de la Justicia. También lo lograron (¡cómo no!) y desde entonces lo mantienen en vilo judicial, lo que lleva a ptreguntarse: ¿Por qué lo hacen? 
Al buscar respuestas a esta interrogante, surgen muy pocas respuestas, entre ellas hay una que considero la más coherente que, aunque no es más que una teoría, parece la más adecuada en tal situación. A saber:
El Deep State carece de candidatos que posean el perfil que representen su condición y sus intereses. Es decir... un exitoso mega-empresario. Al final, ellos no son otra cosa más que exitosos mega-empresarios. Y Donald Trump es la careta que cubre todos su rostros.
Si Trump, una vez en el poder se desvía un centímetro de la línea trazada por el grupo de AIPAC, es muy posible que lo asesinen, como hicieron con los hermanos Kennedy. Por cierto, esta vez matarían a dos pájaros de un solo tiro, pues culparían a Irán del magnicidio y tendrían sobradas razones para convencer a la ONU y a la OTAN de atacar a la nación persa (un viejo sueño de Israel).
De todas formas, y ante la discución interna de si atacar a Irán sería conveniente o contraproducente, se llega a la conclusión de que primero cercarán a la marioneta rubia con amenazas judiciales. Es decir, si no te alíneas con el programa, terminarás en la cárcel.
Esta última opción no tiene nada de políticamente productivo para el lobby israelí, pero se podría haber propuesto para que la primera tuviera razón de ser.
El poder de este lobby radica principalmente en las ganancias multimillonarias que deja el Complejo Militar Industrial, entre otras multinacionales que venden sus productos a los que están en guerras, tanto internas, como externas. Para ellos y sus accionistas... "¡la guerra debe continuar!"
La famosa promesa de campaña de Donald Trump fue "Acabaré con la guerra de Ucrania en 24 horas". Pero después, a medida que se acerca el día de su pose presidencial, comienza a hablar de que el fin de la guerra podría llevar varios meses. Cumplir su promesa electoral de acabar la guerra de Rusia-Ucrania en un día, sería su sentencia de muerte o, por lo menos, de su impeachment y su encarcelamiento.
 
Irán-Israel

La vieja obsesión israelita de destruir a Irán no ha sido apenas de Bibi Netanyahu, es de los judíos sionistas que han gobernado al país hebreo desde que el triunfo de la Revolución Islámica de Irán en 1979 consolidó un sistema socialista que bien puede llamarse de izquierda. Israel es, por antonomasia, y por una historia anti-evolutiva socio-económicamente hablando, ultra capitalista; se refugia en la religión para aplicar políticas agresivamente materialistas. Para ellos, la expansión territorial y el oro (dinero) son sus prioridades absolutas. A las innumerables pruebas materiales me remito, es por ellas que la Corte Penal Internacional y la Corte Internacional de Justicia han solicitado la detención de sus mayores representantes, o sea, de Benjamín Netanyahu y su cúpula de gobierno.
Uno de los más importantes intereses de Israel en acabar con el régimen de la Revolución iraní, no es religioso, sino material:
Irán controla el Estrecho de Ormúz, y por lo tanto, todas las embarcaciones que por allí pasan diariamente rinden dividendos legales al gobierno persa. Si Israel se hiciera cargo del Estrecho, cobraría altos valores como peajes y tendría al 30% del abastecimiento de combustible fósil bajo su poder, lo que usaría como arma cada vez que entrara en conflicto con otras naciones petroleras. Desde allí, controlar el Cercano Oriente y dominar el Medio Oriente sería cuestión de un tiempo relativamente corto.
Mientras Israel exista en el Cercano Oriente no habrá paz en la región, pues al contrario de Palestina, Israel es expansionista, siempre intentará expandir su territorio hacia Medio Oriente. No se puede entender como varios países de Medio Oriente se declaran aliados de Israel... ¿acaso los árabes ignoran las pretensiones expansionistas de los hebreos? Es una paradoja que algunos de ellos vean como rival a otra nación islámica como Irán, en favor de los judíos.
Ya que EEUU es "hermano" de Israel... ¿por qué no le cede uno de sus estados para fundar allí al "Gran Israel"?
Reconozco que este post me haga parecer "anti-semita", pero estoy muy lejos de serlo, pues los palestinos también son semitas y los apoyo incondicionalmente; algunos lectores podrían llamarme de "nazi" por mis críticas a los judíos sionistas, pero... ¿acaso el proceder de estos en contra de sus vecinos no es una moderna réplica del de los nazis de Hitler?

Donald Trump parece estar en la cuerda floja: O sigue estrictamente los lineamientos políticos del Deep State, humillándose ante sus electores a los que ha convencido de que él es un líder anti-sistema, o arriesga su vida física y/o política al intentar enfrentar a sus titiriteros.
La conclusión final es que, si el Estado Profundo estadounidense no tiene candidatos con más prestigio y experiencia política para llevarlos al "Poder", es porque el hegemón norteamericano está en franca decadencia socio/política/económica y cultural.

*

   Walter E. Carena
   X - @WCarena
_______________________________

Conozca al autor y sus obras literarias en: